Tras otra reunión entre empresarios del autotransporte público de pasajeros y representante de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el sindicato confirmó que este martes habrá paro de colectivos de corta y media distancia pero solo en los servicios del interior del país. La medida obedece al fracaso en la negociación por recomposición salarial, que este lunes no llegó a acuerdo en el Ministerio de Trabajo.
La huelga comienza en la medianoche de este martes y durará 24 horas, tal como habían advertido el jueves pasado desde la gremio que lidera Roberto Fernández. Pero según pudo saber Clarín de fuentes involucradas, en pos de continuar la negociación, se acordó no afectar a los colectivos de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano.
La reunión clave que ocurrió este lunes, de manera virtual, arrancó a las 16, y fue una extensa discusión que requirió de un receso para proseguir. Es que a la medianoche vencía el plazo de la conciliación obligatoria que el Ministerio de Trabajo dictó el 18 de mayo y renovó el 29 de ese mes, ante las amenazas de paro del sindicato. Recién hubo definiciones pasadas las 20.30.
Entonces salió un comunicado de la UTA que focalizó su medida de fuerza para el interior del país, con la firma del Consejo Directivo Nacional del gremio y las juntas Ejecutivas Seccionales.
«Ratificamos la medida de acción gremial anunciada, consistente en Paro por 24 horas en empresas de Corta y Media distancia del Interior del País, desde las 00 horas del día martes 13 del corriente mes», dice el comunicado.
Las negociaciones fueron tensas este lunes, en una cita que -ante la demora de un acuerdo- incluyeron un cuarto intermedio para acercar posiciones entre el sindicato, los empresarios y el Ministerio de Transporte. Hasta último momento buscaron «precisar las condiciones económicas que permitan cubrir los costos de operaciones y garantizar el pago de salarios, considerando los reclamos gremiales», indicó la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta).
La insólita negociación entre empresarios, sindicatos y el Gobierno
Según pudo saber Clarín, terminada la reunión, fueron las cámaras empresarias las que salieron a instalar el escenario de un paro total, mientras intentaban conseguir que se involucrara al Ministerio de Transporte en la escena del reclamo: las empresas querían atar el reclamo paritario a recibir fondos de subsidios nacionales adeudados.
En paralelo, y con un gesto de tinte político hacia Sergio Massa -Transporte está bajo su órbita de influencia- el gremio continuaba en paralelo la negociación directa con el Gobierno por los sueldos.
Al punto que, ya entrada la noche trascendió que, en pos de que no hubiera paro en el AMBA, los ministerios de Trabajo y Transporte sacarían «una resolución conjunta excepcional reconociendo el reclamo de los trabajadores y su reclamo del componente salarial».
«De esta manera se asegurará el pago de los trabajadores y los servicios de transporte automotor del AMBA, de jurisdicción nacional. Esta intervención del estado nacional saldrá del componente de subsidios destinados a las empresas«, explicitaron fuentes oficiales como un giro en la negociación, para disgusto empresario.
Entonces se daba la insólita situación de que, mientras los empresarios anunciaban un paro de su contraparte en la negociación, las encumbradas fuentes sindicales y de Trabajo consultadas aclaraban que la medida de fuerza estaba circunscripta al servicio de colectivos de las provincias.
La confusión crecía también por las propias amenazas gremiales en los días anteriores -e incluso de este mismo lunes. Mientras los sindicalistas de la UTA que estaban en la negociación decían que habría servicio de colectivos en Capital, voceros del mismo gremio salían a decir lo contrario por la radio.
Es que en un previo comunicado de prensa, la UTA había anticipado el jueves pasado que «de no acordarse los salarios para el personal representado» se iba a ratificar «un paro por 24 horas en empresas de corta y media distancia de todo el país, desde las 00 horas del día martes 13″.
Finalmente, con el Gobierno tallando en la negociación, se optó por la vía intermedia y que la medida de fuerza se aplique en las provincias.
El Ministerio de Trabajo, por su parte, fijo una nueva fecha de audiencia de negociación: será el jueves 15, a las 12, y -esa vez, aclararon- «en forma presencial«.
Mientras tanto, desde Aaeta continuaban reclamando un aumento en los subsidios que reciben por parte de Nación para hacer frente a los aumentos salariales reclamados por la UTA.
Hubo un curioso punto de acuerdo: tanto el gremio como la cámara empresarial protestaron por las recurrentes ausencias de integrantes del Ministerio de Trabajo en las reuniones anteriores.
El jueves 18 de mayo, en medio de una pelea interna con la facción disidente de la Lista Azul, la UTA sorprendió con el anuncio de un paro para el viernes 19. Desde Trabajo se dictó la conciliación obligatoria, que fue acatada por el gremio, por lo que hubo marcha atrás con la medida de fuerza.
Las rondas de negociaciones se sucedieron sin acuerdo. Así, la UTA volvió a amenazar con una huelga de colectivos para el martes 30 de mayo. Sin embargo, la cartera que encabeza Kelly Olmos prolongó la conciliación obligatoria apenas horas antes de que comenzara el paro. Ese nuevo plazo vencía este lunes a la medianoche.
También habrá paros de trenes este miércoles y jueves
El Sindicato de Conductores de Trenes La Fraternidad, que lidera Omar Maturano, convocó este lunes a un paro total de actividades de 24 horas para el próximo jueves en el sector del transporte de cargas y pasajeros. Es por «la negativa patronal a aumentar los salarios».
En caso de no haber una solución al conflicto, el paro se hará de 0 a 24 del jueves. Paralizará los trenes de todo el país.
El texto sostiene que se agotaron «los plazos establecidos por las partes en el último acuerdo paritario con respecto a la renovación de las condiciones salariales para el periodo abril 2023-marzo 2024». Es por ello que el secretariado nacional del gremio dispuso el «paro general de actividades a nivel nacional por el término de 24 horas«.
Posteriormente se supo que este miércoles otro paro de 24 horas afectará el servicio. En ese caso fue convocado por la Unión Ferroviaria, junto al sindicato de señaleros ASFA y de personal jerárquico Apdfa, por lo que los ramales podrán estar interrumpidos durante dos días consecutivos, de no mediar intervención de Trabajo.
DS