El panameño, de 74 años, abrió la polémica al confesar que teme que la tecnología de «los nuevos sonidos» reemplace a la imaginación.
«¿Qué hubiese pasado si uno hubiera tenido acceso a todas esas herramientas?». Es una de las muchas preguntas que desliza Rubén Blades cuando habla de los nuevos sonidos de la música latina que lideran Bad Bunny o Bizarrap, producidos en buena medida con «samplers» o por computadora.
«Hasta los Beatles se hubiesen aprovechado de esas herramientas», afirma el poeta panameño de la salsa en una entrevista con la agencia EFE, en el contexto de su próxima participación en el Cook Music Festival de Tenerife, en las Islas Canarias.
Sin embargo, cierto peligro percibe Blades. Dice «temer» que la tecnología acabe reemplazando a la imaginación. «Lo que sí creo es que con cada generación se va perdiendo la capacidad de la imaginación en la medida en que aumenta la capacidad de la tecnología«, señala a sus 74 años antes de llamar a tener «cuidado» con este asunto.
Fan de René Pérez
En cualquier caso indicó que se sigue haciendo «buena música latina» con contenido social, como la que realiza «un fuera de serie» como René Pérez, Residente, que en su opinión ejerció una gran influencia en Bad Bunny en temas como El apagón.
«Si Bad Bunny no hubiese sido conocido por sus canciones hedonistas no hubiera podido concienciar a tanta gente que no está envuelta en política con canciones como El apagón«, insiste Blades.
El «hedonismo», la sensualidad y el consumo son la característica de Bad Bunny, en un tipo de música para hombres que parecieran pedir permiso para ser infieles.
La oda a las marcas se cristalizó justamente con Bad Bunny, porque la música urbana, como entretenimiento, se dedicó a perfeccionar, con entrañable elocuencia y sencillez, un sonido que introdujo el consumismo, la rima y la uniformidad cultural.
Revisando el fenómeno, hay canciones suyas que nombran marcas como si fueran el auspicio de ciertas estrofas: Gucci y Jordan en I Like It. Puma, Mercedes, Adidas y otra vez Gucci en Tu No Metes Cabra, Victoria’s Secret en Báilame, etcétera.
De la música a la TV
Además de su conocido rol como músico, últimamente se lo ha visto en la piel de Daniel Salazar, un asesino altamente entrenado en la segunda, tercera, quinta y sexta temporada de la serie Fear the Walking Dead.
Tras más de dos tercios de su vida sobre el escenario, y esencialmente músico, Blades sigue tocando porque es lo que más le gusta: «Me divierto mucho. No estoy en Panamá a tiempo completo, pero cuando estoy con la banda siento que estoy allí, en el barrio, con mis amigos», y es un reencuentro con el público, «que cada vez es diferente», dice.
«Es un trabajo que me gusta y en el que creo. Si yo no creyera en las letras sería un suplicio tener que decir cosas que no siento y que no considero importantes. Cada audiencia nueva me hace reivindicar, a través de su reacción, que fue una buena decisión terminar siendo músico en vez de abogado«, dice Blades, que es graduado en Derecho por la Universidad de Harvard.
Blades no se presentará a las elecciones presidenciales panameñas de 2024, pero apoya la opción de un bloque independiente «interesado en crear una alternativa a la corrupción y mediocridad que existe», al que ayudará con ideas y propuestas.
Fuente Agencia EFE